Después de alcanzar y pasar con éxito la fase de la aceptación, el olvido y el aumento de fuerza de voluntad llega el destino; ay, fatídico destino. Me toca volver a ver esas miradas que tantos quebraderos de cabeza me han llevado y me los vuelven a provocar. "Los domingos me suelo jurar que cambiaré de vida" Apartar la vista y decirte mentalmente que otra vez no, no es suficiente, nunca lo será. Pero por una vez la suerte me sonríe en este tema; este pez cambia de aguas. Espero que la distancia si haga el olvido y así poder pasar página definitivamente, encontrar otra red, u otro pez o yo que sé; soy mucho de metáforas y ni las entiendo; el caso, que es un maldito círculo vicioso del que no consigo salir y ya me estoy mareando. Esta vez será la definitiva, o quizás alguna vieja red me rescate?
domingo, 24 de agosto de 2014
Huye de las redes.
Por algún misterioso motivo soy el pez que siempre cae en la misma red. una red tejida a base de mentiras, miradas cómplices y enajenaciones mentales, la única diferencia entre las distintas redes es el sujeto que la teje. El resultado es siempre el mismo; un pez a punto de ahogarse en sus propios pensamientos. Me obligo a olvidar, a buscar caminos alternativos y personas buenas, pero existe un extraño magnetismo entre mi existencia y las redes de pesca furtiva, esa prohibida y dañina, si.
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