viernes, 28 de septiembre de 2012

Corto, pero no dos veces bueno.


'Las comparaciones son odiosas', y ella estaba harta de que la comparan con todo el mundo, estaba claro que no era la más buena, pero tan poco la peor; solo una persona mas de este caos. 
 Pero quería ser una reina, así que empezó a disfrazarse cada noche. Se ponía sus tacones, esos que la hacían estar por encima de muchas y esos vestidos que hacían que muchos las quisieran encima suya. Se pintaba los labios de un rojo apetecible, cual manzana para blanca nieves. Se metió en un mundo al que no pertenecía, aquella aristocracia de las calles con todas sus normas y castigos si no las cumplías.
Empezó desde abajo y se fue convirtiendo en la reina que quería, cada vez ese disfraz calaba más hondo dentro de ella; pasó a creerse la reina y a actuar como tal
Empezaba a ser ella la que miraba por encima del hombro, desde ese trono construido sobre tratos engañosos, mentiras y hechos deplorables. Hizo cuanto quiso y como quiso,pero todo aquello se iba apuntando en una cuenta que alguien tendría que pagar al final. Pero ahora ella imponía las reglas,unas reglas que todos aquellos idiotas cumplían con gusto. Y con el tiempo aquella reina se fue desvaneciendo, no todo el mundo es capaz de soportar el peso del poder. A ella aquella corona le pesaba demasiado. Acababa dando vueltas por la calle mientras su cabeza daba vueltas en otro sentido. Sus tacones se desgastaban poco a poco y la hacían tambalearse, hasta casi caer. No seria una reina por mucho tiempo. Lo sabia desde el momento en el que se puso su disfraz por primera vez. Lo único que ella quería era llegar, arrasar y marcharse. Pero había olvidado algo en aquella ecuación; no se puede llegar a lo mas alto sin después caer a lo mas hondo, según caía iba dejando a esa reina atrás con su "real dignidad". Una vez hubo caído intentó marcharse, pero solo pudo arrastrarse unos metros. Fue una historia breve, no cabe duda, el CLÍMAX de aquella vida, una vida que las consecuencias del poder no tardaron en arrebatarla a aquella reina destronada transcurridos unos pocos años.

jueves, 27 de septiembre de 2012

Un cuento de verdad.



Esto se llama cuento de realidad,
donde el protagonista eres tú 
y el argumento tu verdad.
 Que aquí de fondo
 no se ve la luna reflejada en un lago
 durante una noche de verano.
La puta luz del fluorescente,
aparece en tu taza de café.
Sales a la calle, una noche de invierno.
El frió recorre tu cuerpo 
aunque estés en el infierno,
y es que este infierno no quema;
 solo te atormenta.



Todos sonrientes menos tú, no pasa nada,
en todos los cuentos ganan los buenos.
 ¿La única diferencia?
 Esto no es un jodido cuento,
tan solo tu vida y tus actos su único sustento.
Mira bien lo que te haces,
aquí no hay maquina del tiempo,
así que si la jodes, al menos di 'lo siento'.
No esperes que te defiendan, irán a por ti.
Si consigues el éxito te intentarán bajar de ahí.
 Pero no todo es tan malo,
aquí también hay príncipes y princesas,
aunque la mayoría falsos, ten cuidado.
Busca bien antes de decir 'lo he encontrado'.



Tienes ya el destino,
solo te falta el camino. 



Si crees en algo lucha por ello
 y si lo pierdes vuelve a buscarlo.
Los únicos buenos aquí son los que no se rinden,
 esos si tienen su final feliz.
No te desesperes muy rápido que todo esto es muy largo.
Es cuestión de resistencia y fuerza de voluntad,
si algo quieres ve a por ello, ahí esta.