sábado, 28 de enero de 2017

I

 Nuca he sido capaz de enfrentarme al mundo tal como es,
tal como soy.

 Tengo miedo a tantas cosas (las cuales nadie imagina) que he acabado viviendo mi propia vida en tercera persona, vivo tan dentro de mi cabeza que hay días que ni siquiera oigo lo que pasa fuera, ni me molesto en intentarlo. 
 Mi imaginación me ha dado unas expectativas tan terriblemente surrealistas que ahora la vida real me parece una gran decepción, lo que siempre ha sido mi refugio ahora resulta que lo único que ha hecho ha sido robarme las ganas.
 No sabéis lo que es ver pasar los días deseando solo y exclusivamente dormir para poder soñar con algo que te haga estar viva; sabiendo que nada real será nunca suficiente, y que por ello, por tu arrastre y desgana por el mundo, tú tampoco serás nunca suficiente.

Poco a poco he logrado ser consciente de que esta vida es mía, es la única que tengo, y que aunque no tenga mayor propósito en ella que vivirla, no sobrevivir, lo cual tampoco es fácil, tengo que aprovecharla; todavía no he salido del trance, pero me estoy despertando perezosamente y empezando a abrir los ojos.

lunes, 2 de enero de 2017

idas y venidas

Hay una parte de mi racional, fría, orgullosa...
Dice que las segundas oportunidades no son buenas,
que prefiere estar sola a mal acompañada,
que tiene razón por encima de cualquier cosa
y que no le gusta nada que le pisen su brillante ego.

Por otro lado está el manojo de inseguridades
 y grande e inocente corazón;
que piensa que las oportunidades son infinitas,
que se conforma con cualquiera que le de cariño,
y que prefiere agradar siempre a la gente con tal de que no se vayan;
aunque suponga un dolor ciego.

Son dos mitades luchando por un mismo territorio.
Ninguna quiere ceder
y aun no saben compartir.

Soy dos mitades que se alternan constantemente
y yo ya no las controlo.